Batalla de Maipù
La bandera de Chile cubrió la expedición y San Martín, con el título de capitán Gral. Del Ejército de Chile, mandó en jefe que las fuerzas se organizaran en el territorio nacional. el ejercito fue formado en su mayoría por chilenos. Su composición puede desprenderse de lo dicho por el general Bartolomé Mitre en el Tomo III de la "Historia de Belgrano", Pág. 159; cuando al hablar de la anarquia, expresa:
"Sería empero muy pobre criterio histórico aquel que atribuyera el resultado definitivo de la guerra social, en que las provincias argentinas estaban empeñadas entonces, a la ausencia de 2000 argentinos (gran parte de ellos chilenos que vestían su uniforme) que con San Martín liberaron el bajo Perú en unión con unos 2000 chilenos". De la cita del eminente biógrafo del Gral. San Martín, puede deducirse la composición de las tropas que partieron a la gran hazaña de dar libertad al Perú.
Los batallones 2, 4 y 5 de gran figuración en la campaña libertadora, pertenecían al Ejército de Chile, al paso que el 7, 8 y 11 eran del Ejército de los Andes, pero en estas unidades más de la mitad de los soldados eran Chilenos que vestían el uniforme de los Andes.
Según la lista de revistas y el estado de fuerzas del 15 de julio de 1820, el ejercito contaba con 296 oficiales, de los cuales el 40% eran trasandinos y 4118 soldados de los cuales 642 eran de las provincias unidas de la Plata.
Durante el desarrollo de la campaña, San Martín desarticuló muchas de las unidades del Ejército de Chile y repartió sus soldados en las unidades del Ejército de lo Andes y del Perú, con lo cual mermó la eficiencia de las tropas Chilenas, pero en cambio hizo que sus soldados estuvieran presentes en todas las batallas que se libraron mas tarde incluidas las de Junín y Ayacucho, pues muchos de los soldados que militaban en el Húsares de Junín eran Chilenos.
La expulsiòn del Perù se disfrazò por el gobierno de O'Higgins enviàndose a un grupo de oficiales para que le trajeran a nuestro paìs por peticiòn expresa del Mandatario.
Ojala estos parrafos sean leìdos por los antipatriotas que aùn creen que la liberaciòn de Chile y Perù fue realizada por oficiales y soldados argentinos. Mucho se le debiò en ese perìodo de la Historia al Ministro don José Ignacio Zenteno.
Chile entregó a San Martín esfuerzo y Gloria y recibió en cambio su indiferencia y olvido. Simplemente Chile era el puente para poder lograr su mayor empresa; La "LIBERACIÔN DEL PERÙ", donde se autoproclama PROTECTOR de dicha naciòn. Se le acusò de muchos robos; entre ellos el PORTAESTANDARTE DEL CONQUISTADOR CORTÊZ (Diario de su residencia en Chile; de Marìa Graham).